lunes, 16 de noviembre de 2015

La viajera del sombrero

Y mientras bajaba por unas escaleras 
de un camino de décadas varias de uso,
una chica bohemia
elegante en su vestir 
y con una esencia similar 
a un viejo elixir
subía por aquellas grises gradas.

Tal era su esencia que no dudé yo en mantener fija mi mirada
Tal era su esencia que cuando alzó su mirar
fue como un éxtasis de un momento inefable.
Fue como un pedacito de cielo en medio del paisaje grisáceo.
Fue como miar a un ángel,
como un milagro en medio de todo
como una luz en la oscuridad
como un momento de meditación en medio del caos
en medio del "caos primigenio".

Ella era el prototipo perfecto para dedicarle una carta
era como una mujer para dar un paseo por un camino sin huellas,
era como presenciar la vida en medio de todo
era mantenerse en la nada,
Era una sonrisa muy bonita,
un saludo que tiende a prisa 
y un recuerdo que siempre ha de inspirar los más elevados sentimientos e ideales.