viernes, 19 de agosto de 2016

Viajero del espacio

Viajero caminante
viajero del espacio
de mentes y rincones sin fin.

Viajero, amigo
viajero nos fuimos
viajero a pie
viajero acompañante
de los que viajan en el cajón de la camioneta.

Viajero mochilero,
viajero libertad
viajero aprendes
viajero novato
viajero hoy tenés una historia para contar. 

miércoles, 10 de agosto de 2016

Reproches del poeta

El poeta se reprocha cuando
interpreta de manera diferente lo que perciben sus sentidos,
es como si le pusiera un toque melancólico o muy romántico a todo.
Parece algo inevitable;

el otro día fue al cine y por poco brota una lágrima en una película que se supone era de "acción",
pues una escena le ha recordado a una chica que ama, pero que está muy lejos.
¡Qué ironía!
Acaso, ¿la vida le pone al poeta como protagonista de las escenas de la vida,
que tal vez para los no poetas es algo "cursi"?

Cómo no olvidar la ocasión en la que le poeta caminaba por la calle,
sin dejar de pensar, en todo, nada ¿? ni el mismo lo sabe.
De pronto, se ha quedado absorto cuando miró a un niño con su abuela.
Se ha quedado conmovido porque para él, ahí había Amor,
para él había sinceridad en la mirada,
era un acto increíble,
mirar esa tomada de la mano entre aquellos desconocidos.
De aquí que,
un día en un camino con muchas piedras,
al lado de un puente y una cantera abandonada
el poeta se alegró mucho
cuando vio a una niña con una mochila y un uniforme de escuela.
Eso le sonaba a Malala y alguna frase de ella.
Y el poeta iluso [¿o no?] pensó que la niña seguro un día va a leer poesía.


El poeta se reprocha porque derrama muchas lágrimas más de lo usual;
se reprocha porque algunas cosas simples a él no le parecen simples;
se reprocha porque hay muchos días que se le ocurren
poemas magníficos para dedicarle a una mujer,
pero no los ha escrito
y en alguna dimensión del mar de pensamientos esos versos se han de perder.
Se reprocha porque tampoco puede ir a recitarle un poema a quien le inspira todas las palabras,
por aquella distancia muy, muy lejos en el horizonte.
Se reprocha por no comprar un tickete de avión;
por lo que piensa, ha pensado;
por la sociedad y sus cosas.

A veces nada lo calma,
solo un recuerdo,
una llamada,
una ilusión.
Corazón.

Se alegra con un viejo diario,
contemplando absorto una foto de hace tiempo,
leyendo versos que trascienden
o escuchando una canción que desde hace tiempo la repite una y otra vez;
como si alguien le hubiera dicho que la escuche,
como si eso fuera el elixir que le trae de vuelta a la vida
y le hace pensar que un día
sus palabras no tendrán que ser enviadas por cartas.

Se alegra cuando mira una vez cada cuatro meses a un amigo de hace tiempo;
se alegra a veces de repente,
como si estuviera loco,
porque la vida a él, le parece el fenómeno más flipante.
Literalmente, la vida, estar vivo, estar consciente de eso
es algo que al poeta lo deja asombrado.
Muchas preguntas, pocas respuestas:
Al poeta le da igual (a veces)
le encanta la idea de que está vivo,
y según él, va a  vivir, literal_
mente.


Un Viaje a Buenos Aires (III) [Pintadas]

Como en todo lugar, siempre hay marcas de pintura en una pared que son caos, y tienen sentido, ¿o no?






Un Viaje a Buenos Aires (III) [La Boca]

Hay que ser sincero, de todos los lugares que estaban en la "lista a visitar", el barrio de La Boca era uno de los imperdibles. Siempre me habían hablado de ese lugar, y tenía mucha intriga por conocerlo, especialmente por La Bombonera.

El día de la procesión fui en la mañana al estadio, pero no pude ingresar porque los hinchas de Boca estaban en plena celebración, y no era día de partido o campeonato, era una fecha especial para los hinchas. Algo así me imaginé antes de ir al estadio porque vi algunos buses o como llaman ellos, los "micro" llenos de gente vestida de azul y dorado, con banderas y cantando.

Me ha llamado la atención la similitud del ambiente de fiesta que se genera (como en algunas partes sudamérica si de fútbol se habla); es otro mundo, es fiesta al ritmo de bombo y trompeta.




¡Y al fin! Era el momento de conocer un poquito de La Boca.
Aquel barrio es pintoresco, podés ver las casitas pintadas multicolor.
Aquí no hay mejor palabra para describir todo con un "stunning".




...

De pronto a lo lejos, estaba "el templo", estaba el Estadio. ¿Por qué tantas palabras para ese lugar? Porque para mí ahí hay magia, hay historia, hay algo que no puede pasar desapercibido.



Estadio de Boca Juniors

La entrada al estadio costaba un precio (que no recuerdo), pero que se puede revisar en una página llamada museoboquense.com. El precio sube un poco más si a parte de una vuelta por las gradas del estadio y el museo quieres visitar los camerinos y la cancha. 

Yo lo vi así: más vale gastar en experiencias que en cosas materiales...






Ya adentro, me sentía como en un poema llamado "El Rugido del León" de Antonio Carrizo. Esa descripción de la entrada al estadio es perfecta y sublime. Es como cuando descubres algo nuevo, bonito, enigmático. Es de esos instante utópicos. 
Este lugar es histórico, es magia, sí, hay que repetirlo varias veces. Pude apreciar dónde se ubicaba siempre "la de la izquierda, por donde se esconde el sol; un gigante sin rostro pero con la vos de todos"... La tan conocida Banda de la 12, la barra de Boca Juniors; vaya que tiene fama, y por varios motivos. 


Personalmente debo decir que me agrada un montón ir a una barra, una banda, a alentar, gritar, y decirles a los tuyos en la cancha que vamos a ganar, que hay que ponerle ganas; porque eso es pasión, eso te enciende, te motiva, y motivas y vibras en un éxtasis de energía. Yo lo veo así. Ahora bien, no hay que hacerse el de "la vista gorda", o sea el indiferente ante muchas realidades que no solo se dan en Argentina, sino en toda sudamérica, incluso en donde vengo. Aquí se debe hablar de violencia, alcohol, descontrol, indiferencia (sí, suena irónico, pero sí), poder, drogas, idiosincrasia, preguntas...
Cuando fui, por ejemplo no se podía jugar un Superclásico Boca-River con las dos hinchadas, solo podía ir la hinchada local. Y recuerdo que me dijo un hincha de River de allá: "ahora si vas a la zona cercana del Monumental (el estadio de River)  con una camiseta de Boca, salís mal". 
La cuestión es que por la violencia (y más motivos relacionados) una persona "normal" que solo quiere ver un partido, y gritar también, emocionarse, (como ser humano que es), ya no lo puede hacer.

He aquí otro factor común: violencia en el fútbol. Amig@ lector@ , pregunte a alguien de sudamérica algo acerca de ese tema y es muy probable que obtenga respuestas similares. 
El tema de la barra, los barrabravas o como los dicen en Europa, los ultras, es un tema (a mi parecer) del que no se debe ser indiferente. Una barra es una muestra de nuestra sociedad; sí, en muchos aspectos. Por ej. es muestra de unión: ¿sabía que en una barra cada miembro es como un herman@?
Todos se cuidan. Es una especie de hermandad. 
También, una barra es una muestra de organización, ¿sabía que hay cánticos y melodías con bombos, trompetas, guiros, y más instrumentos? Y suenan bien, son ritmos contagiosos.
Por otro lado, ¿sabía que hay gente que se emborracha y se droga en la barra? ¿sabía que en un clásico, algunos ven al equipo rival como su enemigo antagónico y están dispuestos a agredirlos y en algunos casos incluso a... (me he quedado un rato pensando, porque es feo escribir una palabra:) matarlos?
Es interesante lo que pasa por la mente de un miembro de la barra, y luego por la "mente colectiva" de todo el grupo. Se pueden identificar patrones que permiten darse cuenta de lo que puede constituirse como causa para que se produzca un comportamiento que refleja lo más feo de la humanidad. 
Algo que me decepcionó mucho fue cuando una amiga de Boca, me ha dicho lo que pensaba del poema que mencioné de Antonio Carrizo: "eso suena muy utópico". Ahora todo está corrupto; los clubes, la barra...
No he dicho nada, eso merece un rato de silencio y reflexión. 

Son realidades duras, que no quisiera escribirlas, pero sino, ¿qué? Sería uno más que se suma a la indiferencia y hace como si no pasara nada. "No quiero ser feliz a costa de ser un idiota"*
Me quedo con algunas ideas del poema, me quedo con la idea de que el deporte une masas, despierta pasión, y refleja el amor del ser humano, el amor por un sueño, el amor por la vida, el hoy. 

En las barras y el fútbol (y cualquier deporte en general) el enemigo más grande es la indiferencia. 


A pesar de todo, ese día decidí sonreír y disfrutar de todas las historias que me contaba una guía del estadio acerca del equipo "xeneize". ¡Me ha encantado! Y más el momento que nos ha llevado al lugar donde se suele ubicar la 12, y hemos saltado como si Boca hubiera metido un gol. 
Me sorprendí al saber que Maradona tenía una suit de por vida...

El camino a los camerinos ha sido flipante, porque luego se conecta con el camino que sale a la cancha. No hay palabras para describir esos momentos. 








Al final, sostener una Copa Libertadores, mirar el sellito del escudo del equipo de mi país, y todo eso en la cancha. No puedo pedir más.
Hoy ha sido un día estupendo. 






*Voltaire 

martes, 9 de agosto de 2016

Un Viaje a Buenos Aires (II) [Una noche en procesión]

Es de noche y es Semana Santa también, para todo aquel que sea católico.
En sudamérica hay muchos factores comunes, y uno de ellos es las creencias religiosas. 
La gente sale en procesión con imágenes de Jesucristo, y realizan algunos cantos y rituales como ofrendas a Dios. 
He caminado junto a la procesión con muchas personas, durante un tiempo. Todo termina en una iglesia que era conocida porque ahí solía dar misas el papa Francisco.
Aquí me acuerdo de algo que vi en la mañana:


Empero, en la noche, esta era la iglesia:






Una oración, y, reflexión.

Hay que seguir caminando, ahora no recuerdo cuál es el camino por el que vine; no me sé la ruta que me lleva al hotel. Trato de mirar en mi celular para que Google Maps haga su magia, y no sé si es a propósito pero la batería ha muerto justo cuando luego de cinco segundos veo el mapa. 
¿Habrá que seguir caminando, verdad?

De pronto, hay una multitud. Sí todos miran como hacen un gran show los danzantes. ¡Qué genial tomarse la vía para bailar!








De lejos escucho una melodía... Es una vieja canción conocida, pero no recuerdo su nombre. A medida que me acerco, veo al guitarrista y sí, el recuerdo me ve a mí; es una canción de Rata Blanca, una banda argentina que tiene unos "himnos", me refiero a canciones que me encantan sobremanera. Una de esas canciones es La Leyenda del Hada y el Mago, con mucha magia sí.

Justo en esa ocasión, el guitarrista tocaba en la calle la canción "El sueño de la gitana"! 

¡¡Qué gran solo!! Mi pana si sos amante del rock vas a ponerte a corear en medio de la calle la canción que solo vos y el guitarrista conocen bien.
Acá va la canción, es un poema de un Mago a una Gitana. 





#No olvidar escuchar La Leyenda del Hada y el Mago.


Qué genial ha sido el camino de vuelta al hotel, Creo que me ubico ahora dónde estoy. Como sea he llegado a dónde debía. 



Un Viaje a Buenos Aires (II) [Caminar hacia libros]

Recorrí una calle muy concurrida, no he parado de mirar a todos lados.
Me llama la atención todo, desde las caras de las personas, hasta la arquitectura de los edificios, o un carrito donde vendían posters de bandas de rock. 


Lo que sin duda me ha encantado, es la cantidad de librerías y libros que había. Algo que no debe faltar en un recorrido (si es que se es amante de los libros), es la librería Ateneo, la cual tiene algunas sucursales. Ahí es muy probable que se encuentre lo que uno busca porque por ej. en mi caso encontré un libro de la correspondencia de Bruce Lee llamado Las Cartas del Dragón. (¿A que es rebuscado el libro?)
Y otra cosa que mola mucho es que hay discos de varias bandas de rock muy buenas, y hasta de música clásica. 
¿A que eso es un pedacito de cielo?






En efecto, había libros de todo. 



P.D.: ¡Vivan las matemáticas!


Un Viaje a Buenos Aires (II) [Muchos colores]




¡Qué bonita Buenos Aires!

Mil colores, muchas caras,
cuantas miradas que se cruzan,
de todo el mundo de todos los lugares,
historias inimaginables.













Debo decir que en muchas zonas me sentía ciudadano del mundo,
y a la vez en Buenos Aires, porque tiene la magia, que embriaga en medio de tango, libros y comida buenísima.





                              


Un viaje a Buenos Aires (II)

¡Comienza un nuevo día!

Ese día la gente de Argentina recuerda lo que cantan los de Attaque 77 en la canción 2 de abril. 
Sí, este viaje lo describiría solo con canciones de Attaque. Porque a mi parecer es una banda multimelodía que sabe cantar lo adecuado y dice lo que a veces la cobardía, el dinero, la indiferencia u otras circunstancias opacan.
En fin, ese día es sinónimo de Malvinas.


"Trapos" en la Plaza de Mayo


¡Genial la canción! Pero es feriado y me he asustado cuando la chica que atiende en el hotel me dice que todo está cerrado y que no podré cambiar los dólares a pesos argentinos. Por cierto, vengo de un país que tiene el dólar como moneda oficial, and it is not the USA!
Sea como sea salí con una mochila pensando cómo voy a pasar ese día sin dinero. Además, no tenía batería en mi celular... #Nota importante: antes de ir a otro país fijate cómo son allá los cosos esos para cargar los aparatos electrónicos. Solo tenía un poco de batería en una cámara que cargué con corriente de mi país.
De a poco me olvidaba del susto cuando vi el Obelisco; el día estaba  despejado y pues se pintaba una postal chévere. 


 


Después al seguir caminando por una avenida estaban los "arbolitos"; eran personas que te cambian dinero, y a muy buen precio. Una realidad es que puedes cambiar por el banco y con los personajes descritos. Todo tiene sus ventajas y desventajas, por un lado podrías obtener más dinero, y por otro te podrían timar. Al final, es una mezcla de circunstancias. 
Como sea cambié el dinero y ahora sí podía estar tranquilo.

#Un dato curioso es que hay billetes (de pesos argentinos) que por poco se deshacen, y que a billetes (USD) de mayor valor, te dan más por el cambio (me refiero de dólares a pesos). 
Así que pilas...

De alguna manera todo esta conectado en cuanto a los "businnes"; por ej. el taxista que me llevó cuando llegué me ofreció darme como una especie de tour, y sabe con quien contactar para conocer o hacer algo.

Como en un día hay varias cosas que contar esta historia se divide en varias partes...

lunes, 8 de agosto de 2016

Un viaje a Buenos Aires (I)

Cuenta la historia del Caminante que un día decidió viajar a un lugar del que siempre le hablaron, al lugar del que guardas una estampita en la billetera o tienes de fondo de pantalla porque te inspira un montón.
Para comenzar esta historia recuerdo la canción de Attaque 77 (una banda argentina) llamada Sueños, dice algo como:

"...me perdí sin una razón,
tal vez tuve la intuición y me dejé llevar sin pánico..."




Y así fue, así me fui. 

No tenía ni idea como funciona el mundo allá, recibí un poco de referencias gracias un@s ami@s que esperaba ver. Aún así persistía el miedo a lo desconocido...

Entonces, estaba en el avión y por "coincidencia" al lado mío se sentó la familia de un ex-futbolista argentino; solo crucé palabras con su esposa e hija y, ha sido genial escuchar hablar de Maradona como cuando hablo a alguien acerca de un buen amigo.


Cuando llegué, el enviado del hotel debía esperarme pero no estaba... Luego, afuera estaban varios taxistas ofreciéndome "shevarme"... Entré de nuevo al aeropuerto y encontré al tipo que me transportaba. Habíamos quedado desde antes de mi venida que él me llevaría al hotel.

Camino a mi hospedaje rebosaba de felicidad haber llegado, y empezar a escuchar respuestas a algunas preguntas que tenía, por ejemplo, acerca de esa rivalidad entre Boca y River. Acá se respira mucho fútbol.


Luces fugaces como la mirada cruzada cuando el semáforo estaba en rojo y los autos en los que viajábamos coincidieron.



El hotel donde estuve estaba cerca a la Casa Rosada, El cuarto era angosto, y la estructura vieja...(Consecuencias del bajo precio) Pero pff!! me daba igual, solo quería ir a descubrir algo de la ciudad. Como era casi la madrugada, debía esperar al día siguiente...


Un poema más para vos

Leer un texto tuyo es como volar.
Sí, literalmente es como poesía,
poesía como adjetivo,
porque esa palabra para mí suena bonito,
tan bella como lo que representa
tan bonita como las palabras que terminan en "ía"
algo así como epifanía (y esos momentos de inspiración).
Es como sonrisa=alegría,
es como la luz de un nuevo día,
una nueva ilusión.

¿Te imaginas como alteras un mundo de pensamientos, de ideas, de dimensiones más allá de las fronteras

de la mente y la imaginación.?
¡Eso para mí es un milagro!
Eso es tan genial, tan guay, tan chévere, tan gara, tan flipante.
que alucinás, que volás, que pensáis y te alegrás.
Sí, inspirás a escribir,
a
sonreír,
a revolucionar,
a volar.

Un gracias infinito a vos,

un gracias
porque inspiras amar la vida.

Un día en Bogotá (pintadas)

Bogotá ciudad bonita, llena de contrastes y muchos colores.
¿Por qué?
Porque en un día podés observar varios mundos, y pintadas...